sábado, 31 de julio de 2010

Rebelarse vende: el negocio de la contracultura

Los movimientos contraculturales fracasan en sus deseos de transformar la realidad, ya todos ellos comparten un error fatal en la manera en que entendemos la sociedad, por lo que la contracultura no es una amenaza para "el sistema" sino que lentamente se ha convertido en otro producto que éste ofrece en el mercado de consumo capitalista.

Así reseña Wikipedia el libro Rebelarse vende: el negocio de la contracultura (Nation of Rebels: Why Counterculture Became Consumer Culture en la edición estadounidense) es un popular ensayo escrito por los autores canadienses Joseph Heath y Andrew Potter en 2004

Esto me ha perturbado desde hace unas semanas y necesitaba escribirlo en un artículo, ya que ha sido un tema recurrente que me ha dejado pensando en muchas cosas.

Este error de los movimientos contraculturales sería esencialmente identificar que los males de la sociedad, del mundo o del ser humano se hallan solamente en el "conformismo" o en la falta de algo, la necesidad de amor de luz, de ayudar a los animales, al calentamiento global a despertar a evitar el consumismo y tantas cosas y no en la injusticia. Los autores enfatizan la necesidad de preocuparse más por la justicia social de modo concreto y menos por la simple agitación cultural contra las normas tradicionales establecidas. El libro toma el tema de la contracultura y su "anticonformismo" como un mito que de alguna forma domina el pensamiento político, económico y cultural en el que se basan tanto el movimiento antiglobalización como el feminismo y el ecologismo, así como otras corrientes de pensamiento que se proclaman a sí mismas como "progresistas" sin serlo en verdad.

Estaba actualizando wikipedia cuando vi este artículo de Víctor Jara
"El amor a la justicia como instrumento del equilibrio para la dignidad del hombre", oración de Víctor Jara.

Hipis - Illuminatix - Ufologico (que mas contracultural)
Todos sabemos lo que hay que hacer pero nadie lo hace, el miedo de quedar en la calle o ser mal juzgado no querido no aceptado o tantos miedos que simplemente nos limitan, pero justo mas allá de esos temores eres soy feliz con cosas pequeñitas, y comprendes que al final no se trata de salvar a la humanidad, se trata de ser mejor persona y mientras mejor uno lo sea, mejor será lo que uno pueda aportar al medio y es que es el medio el que nos mantiene y da calidad de vida. La sociedad somos nosotros mismos, con toda la vida que nos rodea, y es esa vida que nos rodea la que nos necesita, por ejemplo para mi no se trata de ser como el padre hurtado ayudando a los pobre o quizás si depende de lo que me toque de lo que sienta en el momento, por ejemplo mas que la pobreza no soporto la calidad de vida de Chile, como terapia aporte mas información sobre los flaites en wikipedia y es que no es la pobreza, son las estafas, me duele el alma de que la gente haya tenido que decidir entre dos malos presidentes en vez de anular, después pienso bueno ojala Piñera cambie pero veo detalles que quizá son pequeñitos pero significan millones en contra, como que haya subido los pasajes del Transantiago en pleno mundial o que no quiera subir el sueldo siendo que es bajísimo en relación a lo que se gasta viviendo en Santiago, en realidad quiero cambiar eso, trate de ayudar a personas cercanas como pude pero solo fue desgaste un sacrificio en vano que no me hacia feliz, en un momento me di cuenta de que simplemente integrándome realmente como yo soy a este sistema lo puedo cambiar. Estoy algo loco, lo se, pero una vez alineado todo estará en orden.

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